El fútbol tiene formas extrañas de mostrarnos que todo es completamente impredecible… y que cada ausencia puede ser el comienzo de otra historia. Algo así ha ocurrido con Endrick Felipe (18 años), cuya figura en el escalafón blanco ha dado un paso atrás sin ni siquiera verlo venir, y Gonzalo García (21 años), que ha sabido aprovechar la oportunidad tras la baja por enfermedad de Mbappé en toda la fase de grupos del Mundial de Clubes.
Xabi Alonso alaba la figura de Gonzalo en el Mundial de Clubes
Así las cosas, mientras Endrick se recupera de una lesión en la pierna derecha, otro nombre empieza a ocupar el espacio que él dejó libre para la cita mundialista. De ahí que el delantero brasileño se haya puesto nervioso con el ruido que ha generado el buen hacer del canterano español. Y es que Gonzalo, al que nadie tenía en su radar al comienzo del torneo y del que se hablaba más de las ofertas de otros equipos que de otra cosa, ha logrado hacerse gigante en los planes de Xabi Alonso tras entender a la perfección lo que necesitaba el equipo: equilibrio y presión en defensa; fijar centrales, juego aéreo y peligro constante en ataque. Y a todo esto le suma además goles (2) y asistencias (1).
Aprender a esperar tu momento
A veces, tu gran momento no es cuando brillas, sino cuando aprendes a esperar. Una lección que ha aprendido Gonzalo García para poner en alerta al brasileño, que acelera su vuelta y viaja a Estados Unidos para ponerse a las órdenes de Xabi Alonso a partir de octavos. Endrick ha visto como su compañero se ha convertido en una de las grandes noticias del Madrid en el Mundial. “Es el típico nueve, que sabe esperar su oportunidad, que se mueve bien. Estoy muy contento por él. Tiene cosas de Raúl por sus movimientos“, explicó el técnico en rueda de prensa sobre un futbolista que juega con la confianza del que sabe que nadie le puede parar.
Gonzalo celebra su segundo gol en el Mundial de clubes.
Trabajo silencioso, humildad, instinto. Donde Endrick no pudo estar, él respondió. Y lo hizo con fútbol y con goles. “Puede aportar lo que hizo el otro día, por eso fue la apuesta. Es un delantero referencia, marcó un gol y tuvo más ocasiones. Es importante tener jugadores con ese olfato. Necesitábamos esa posición“, confesó el tolosarra. Sin embargo, más allá de sus guarismos en estos tres partidos, Gonzalo está demostrando ser un 9 muy completo. Capacidad asociativa, posicionalmente perfecto, no duda en meter la cabeza en la boca del lobo y con un físico que le hace ganar duelos con facilidad para generar segundas jugadas de las que se benefician sus compañeros, que están disfrutando como nunca cuando Gonzalo fija a los centrales.
La lección que enseña Gonzalo
“No da un balón por perdido, va a presionar y eso da muchos puntos. Creo que marcará muchos goles en el Madrid”, explicó Joselu tras el encuentro ante el Al Hilal. Un futbolista con el que se le ha comparado a Gonzalo en estos días tras su explosión incontrolable por su capacidad para hacer gol. Son 10 centímetros de diferencia, pero la voracidad del joven iguala el poderío de Joselu. Potencia y salto al servicio de Xabi para esos partidos en los que al Madrid se le encierran y no encuentra manera de romper el entramado defensivo.
Desaparecerá del once en cuanto vuelva Mbappé, o al menos eso dice la lógica, pero oposita a equipo de rescate cuando se tuerza el día. Un mensaje directo a Endrick y Rodrygo para dejar claro que al Madrid tiene ya la figura número 12. Sobre el terreno de juego del Lincoln Financial Field dejó una nueva demostración de sacrificio, peleando cada balón, presionando a la defensa y rematando todo lo que se le ponía por delante. El canterano blanco, que ha destrozado todas las expectativas, pone contra las cuerdas al otro nueve del equipo blanco, que va a viajar a Miami para apuntarse a la expedición blanca, y a Rodrygo. El delantero brasileño, que lleva semanas entrenando en Valdebebas, en principio no va a poder jugar en el Mundial, pero cree que es importante estar cerca de Xabi Alonso y de su cuerpo técnico para avanzar en las relaciones directas antes de volver a estar disponible.
