El fichaje de Joan García por el FC Barcelona traerá mucha cola, es evidente que su incorporación al eterno rival ha hecho mucho daño a la hinchada blanquiazul, que veía en el de Sallent un referente. Los besos al escudo y el engaño del portero, a club, compañeros y entrenador, no cicatrizará de un día para otro.
Los culés y sus voceros, evidentemente, están dispuestos a hacer toda la sangre que puedan con este asunto, basta ver programas como el Onze de Esport3 para comprobarlo. Por allí aparece un tal Lluís Carrasco que saca a pasear toda su prepotencia y chulería, nada nuevo bajo el sol.
Afortunadamente, Gonzalo Bernardos pudo dejarle clara su postura, y la de la mayoría de la afición del Espanyol, que no está dispuesta a dejarse pisotear por las arrogancias azulgranas. El club espanyolista ha logrado la segunda venta más importante de su historia, ahora ya toca mirar hacia delante.